viernes, 10 de enero de 2014

Resumen de High Speed! - Capítulo 5

Espero que os gustara el capítulo anterior. En este veréis cómo siguen entrenando para la carrera de relevos.

Como siempre, el resumen original está en el tumblr de fencer-x, así que echadle un vistazo si podéis :)







Rin y Nagisa están entrenando para la carrera de relevos, y Rin está esperando a que Nagisa acabe el largo, pero ve que va muy lento. En vez de lanzarse al agua cuando Nagisa toca la pared bajo él, se queda quieto, y Nagisa le pregunta qué sucede. Rin intenta descubrir qué hace Nagisa para ir más despacio, pero Nagisa ni siquiera se ha dado cuenta de que va más lento. Rin no sabe cómo tratar con Nagisa, que es demasiado abierto y honesto. Rin cree que la gente que quiere ocultar algo tiene más debilidades de las que aprovecharse... lo sabe por experiencia. Rin decide que Nagisa va más lento porque no siente la presión de querer nadar más rápido que alguien. Normalmente se fija en sus oponentes, pero ahora nadando solo no tiene a quién vencer. Así pues, Rin decide que se enfrentará a él en una carrera, para ver lo lejos que puede llegar.
Al principio, Rin puede sentir los dedos de Nagisa en sus caderas, la distancia no varía ni siquiera al dar la vuelta, pero cuando solo quedan 15 metros, Rin siente que los dedos de Nagisa se alargan, su brazo entra en su ángulo de visión cuando empieza a alcanzarle. Prácticamente está arañando su hombro. Un escalofrío recorre la espalda de Rin, que por fin entiende lo que sintieron los oponentes de Nagisa durante la competición. Cada movimiento reduce la distancia entre ellos, y pronto Nagisa alcanza la barbilla de Rin con sus brazos. Cuando quedan 5 metros, sus cabezas están casi a la misma altura. Rin ya no ve a Nagisa, sino a algo que no puede describir. "Va a adelantarme..." piensa mientras hace más fuerza con los hombros y adelanta a Nagisa. Cuando llega a la pared, sale corriendo de la piscina, jadeando más de lo que debería. Descubre que sentía miedo de Nagisa. Había intentado escapar de él cuando le seguía, e incapaz de permanecer con él en el agua por más tiempo, había salido corriendo de la piscina.
-¿Qué sucede, Rin-chan?
Rin ni siquiera se atreve a mirarle, no sea que descubra lo que siente.
 -¿Ves lo que consigues cuando quieres?
Nagisa está confuso, pues ha perdido. Rin piensa que Nagisa es el mismo de siempre, su compañero, como un hermano pequeño, no es algo temible e indescriptible. Finalmente le mira a los ojos.
-Tus brazos son más largos.
Tras hablar un poco, Rin descubre que Nagisa aprende enfrentándose a otros, y decide que a partir de entonces entrenarán compitiendo. Mientras saltan al agua de nuevo, se pregunta cómo alguien con un cuerpo tan pequeño casi consigue adelantarle a él.

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Durante los días siguientes, separan a todos por grupos según el estilo que han elegido. Makoto está practicando el estilo espalda, aunque no es que lo haya elegido él. Simplemente no había más opciones libres. No se le da mal, pero nunca ha intentado hacer el giro que se realiza en los campeonatos. Makoto se agarra al borde de la piscina, flexiona las piernas y empuja. Normalmente siente como si un demonio arrastrara su lengua sobre él cuando se mete en el agua, pero no esta vez. Aún parece que le está lamiendo, pero no ha intentado aprisionarle. Por primera vez, Makoto nada por sí mismo, sin huir de nada, mirando fijamente el techo de la piscina y sintiendo el agua a su alrededor. Durante un momento, se pregunta si habría sido algún cetáceo en una vida anterior, pues es la única explicación que encuentra para sentirse de ese modo, tan en plenitud.
Después de salir del agua sigue pletórico, pero intenta calmarse y se sienta en el banco, donde está Aki. Hablan durante un tiempo, y Makoto descubre que Aki nada la parte de estilo libre en su equipo, y que un profesional va a colocar los ladrillos que han fabricado en el colegio. Makoto comenta que podrían habérselo pedido a Haru, y revela que el propio Haru había colocado ladrillos en el jardín de su casa para hacer un camino. A Aki le sorprende que Haruka pueda hacer de todo tan bien, pero parece algo triste y pensativa. Tras indagar un poco más, Aki confiesa que había estado preguntándose por qué Haru solo nada estilo libre, y añade que si pudiera entenderlo, igual podría nadar tan rápido como él. Makoto mira hacia el grupo de estilo libre. Haru destaca por sus movimientos gráciles.
-¿Sabes? La verdad es que a Haru tampoco le gusta nadar en especial.
-¿Eh?
-Y tampoco es que le guste el estilo libre especialmente.
-¿Entonces por qué...?
-Nunca he preguntado, pero creo que para él, nadar tiene un significado distinto al del resto de nosotros.
-¿Cómo qué?
-Para Haru... estar en el agua es algo natural para él.
Makoto supone que la forma más natural para hacerlo es el estilo libre, y rememora lo que él mismo había sentido unos minutos antes. No sabe con certeza si es lo mismo que siente Haru, pero presiente que es algo parecido. Aki admite que no puede comprender algo así, y Makoto intenta darle ánimos, diciendo que no hay nadie que pueda entender los sentimientos de Haru.
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Al día siguiente, Haruka coloca los ladrillos sobre el cemento ya preparado, mientras Aki se disculpa. Haruka le dice que no se preocupe, que ya lo ha hecho antes, y que el albañil le dijo cómo tenía que hacerlo. Mientras Haruka se centra en colocar los ladrillos, Rin se acerca, como si fuera de paso, y alaba su trabajo. No es una pregunta, así que Haruka no dice nada en respuesta. Rin no se da por vencido y proclama que él también quiere intentarlo. Haruka se siente molesto, porque no ve la necesidad de que Rin tenga que anunciarlo a bombo y platillo. Que lo haga si quiere, pero que deje en paz a Haruka. Rin se va, y Haruka se tranquiliza y se fija en el cemento, que no ha quedado uniforme. Le sorprende que Rin le haya afectado tanto.
Rin vuelve, se sienta al otro lado y empieza a poner el cemento con esmero. Están sentados a dos metros de distancia y Haruka odia esa situación. Si Rin se hubiera sentado más cerca, Haruka se habría levantado y se habría ido. De haberse sentado más lejos, no podría haber iniciado una conversación.
-Haru... mañana empezaré a cronometrarme. Quiero... empezar a entrenar para el torneo, así que...
A Haruka no le sorprende que intente hablar con él, pero sí que no decida todo por su cuenta como siempre hace.
-Pues adelante.
Haruka es tan inexpresivo como siempre, y no aparta su mirada de los ladrillos. No entiende por qué tendrían que hablar de esto justo en este momento. Rin, sin embargo, parece satisfecho.
-Nagisa... se está volviendo más rápido.
Haruka ya lo sabe, pero Rin sigue hablando, y comenta que los brazos de Nagisa cada vez son más largos, que cuando quiere puede mejorar su forma, pero solo cuando se siente forzado a ello, que cree que podría llegar a ser incluso más rápido...
Haruka se siente cada vez más irritado. No quiere hablar de ese tema, intenta ignorar a Rin para no enfadarse de verdad y se concentra en mantener el cemento uniforme. Cuando levanta la vista, ve que Rin casi ha acabado, y que su sección está perfecta, y siente un cierto temor al ver lo hábil que es Rin a pesar de haber estado hablando todo el rato.
Makoto aparece entonces con un cubo de cemento, y Rin comenta lo que le estaba diciendo a Haruka. Haruka aprovecha para abstraerse de la conversación y concentrarse en colocar ladrillos mientras piensa en que quiere meterse en el agua.
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Haruka llega al puente corriendo. Hace tiempo que no corre solo. Nunca se había planteado la posibilidad de correr o nadar en grupo. No entiende por qué todos están tan obsesionados con eso, cuando es mejor hacerlo solo. Pero Rin parece tan entusiasmado cuando habla de ello, y Makoto le dijo que le necesitaba, y Nagisa quería formar parte del equipo, e incluso Aki le dijo que debería hacerlo. No entiende por qué la carrera de relevos es tan especial, pero si puede aprender algo de ello, merece la pena intentarlo. Cueste lo que cueste.
Cuando llega al vestuario, se encuentra con Nagisa, que le pregunta qué ha estado haciendo para llegar tarde y quiere saber dónde están “Rin-chan y Mako-chan”. Haruka nunca sabe cómo comportarse con él. Le dice que están trabajando en el proyecto de graduación y que probablemente no asistan a clase de natación. Nagisa decide que ambos entrenarán para la carrera de relevos. Al ver cómo nada Nagisa en carne y hueso, Haruka se da cuenta de que su estilo es más complejo de lo que pensaba.
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Cuando terminan el proyecto de graduación, se centran más en entrenar para el torneo. Primero entrenan para las carreras individuales y luego para las de relevos. Haruka está en el grupo de estilo libre, Makoto en los de braza y espalda, y los otros dos se dedican solo a la carrera de relevos. Nagisa y Rin entrenan con Aki y Yuuki. Aki está sorprendida al ver lo mucho que se está esforzando Nagisa, ya que no le creía capaz de algo así. Nagisa está exhausto, pero nunca sale ninguna queja de sus labios. Aki le ayuda a salir de la piscina al ver que le cuesta subir al bordillo, y le ofrece descansar un rato. Nagisa le da las gracias jadeando. Nunca intenta hacerse el fuerte. Si le dicen que siga nadando, lo hace, si le dicen que descanse, lo hace. Nagisa siempre es lo que parece, no oculta nada.
Una vez sentados en el banco, Aki elogia a Nagisa por haber mejorado tanto. Nagisa contesta que tiene que ser aún más rápido o perderá. Cuando Aki pregunta contra quién perderá, Nagisa tan solo contesta que eso es lo que dice Rin, y Aki se pregunta a quién se estará enfrentando Rin. Siempre parece que Rin tiene un objetivo y que intenta llegar a él lo más rápido posible. Tras un momento de silencio, Nagisa le pregunta a Aki por quién le enseñó a zambullirse en la piscina. Al parecer, Nagisa no consigue hacerlo bien, y Rin no quiere enseñarle. Eso sorprende a Aki, pues parecía que Rin se había encariñado mucho con Nagisa. Ante la insistencia de Nagisa, Aki le recomienda mirar más allá de la punta de sus dedos cuando salta, como si quisiera llegar al otro lado de la piscina. Aki se queda algo preocupada mientras mira a Nagisa a los ojos, pensando que igual hubiera sido mejor decirle que no lo sabía antes de ofrecerle un consejo tan vago, y cuando Nagisa se va corriendo a ponerlo en práctica, se queda algo más aliviada. Nagisa es como un hermano pequeño para ella, pero a veces su mirada, tan pura y honesta, le hace perder la confianza en sí misma y sentir que quiere escapar.
En cuanto Rin sale de la piscina, se dirige a Aki para preguntarle qué le ha dicho a Nagisa. Parece estar interesado porque Nagisa se ha zambullido de forma algo distinta a lo que suele hacer. Aki confiesa que le ha dicho que se fije un objetivo al saltar. Rin, por su parte, confiesa que a Nagisa no puede mandarle que coloque su cuerpo de alguna forma específica. Lo hace de forma natural una vez siente cómo hacerlo, pero no es capaz de poner en práctica la teoría si no lo ha sentido antes. Por eso, Rin cree que el consejo de Aki ha sido bueno, pues tiene que ver con los sentimientos y no con la postura.
Aki se alegra y se zambulle en la piscina, pensando en su propia meta. Mientras nada, se pregunta si alguna vez ha sido tan directa y natural como Nagisa a la hora de nadar, y le molesta no saber la respuesta.

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